Julio César Tello Rojas nacio en Huarochirí el 11 de abril de 1880, fue un destacado médico cirujano y antropólogo peruano.1 Fue el primer arqueólogo indígena de América. Es considerado el padre de la arqueología peruana. Descubrió las culturas Chavín y Paracas, y creó e impulsó el Museo de Arqueología, Antropología e Historia del Perú.
Yo no soy profesor ni arqueólogo, solamente soy un hombre de campo, un huaquero.
Frase: Julio C. Tello
Biografía
Julio César Tello fue hijo de una familia de agricultores. Julio César Tello Rojas nació en la provincia de Huarochirí. Su familia era quechua-hablante. Sus padres fueron Julián Tello García y María Asunción Rojas Erques. Desde pequeño destacó por ser inteligente, por lo que le aseguraron éxito en la vida; lo apodaron Sharuko (valiente). Sus estudios primarios los hizo en Huarochirí y en 1893 se trasladó a Lima para cursar secundaria en el colegio dirigido por Pedro A. Labarthe, aunque la concluyó en el Colegio Nacional Nuestra Señora de Guadalupe.
En 1900 ingresó a la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, donde fue condiscípulo de un hijo del ilustre tradicionista don Ricardo Palma, por lo que frecuentó su casa, ganándose el afecto del anciano escritor, quien, en su condición de director de la Biblioteca Nacional del Perú, consiguió un puesto como conservador. Fue allí donde le nació a Tello la inquietud por la ciencia y la investigación, especialmente la arqueología y la antropología. Su acercamiento al mundo prehispánico se produjo a partir de la lectura de un estudio de las lenguas indígenas de Sebastián Barranca. En 1906 ofreció su primera conferencia en torno a unos cráneos prehistóricos desenterrados en tumbas prehispánicas de Yauyos. Pero antes que nada decidió culminar su carrera y se graduó de bachiller en Medicina el 16 de noviembre de 1908, con su tesis «La antigüedad de la sífilis en el Perú», un original estudio sobre dicha enfermedad. Finalmente se recibió como Médico Cirujano en 1909.
Gracias a una beca concedida por el primer gobierno de Augusto B. Leguía viajó a los Estados Unidos para realizar estudios de postgrado en la Universidad de Harvard, permaneciendo allí por tres años.
A su retorno al Perú en 1913 comenzó su labor arqueológica acompañando a su maestro Aleš Hrdlička en sus investigaciones por los valles de la costa central. Fue nombrado director de la sección arqueológica del Museo de Historia Nacional, cuya organización inicial orientó hasta verse obligado a renunciar en 1915.
Militó en el Partido Nacional Democrático y fue elegido diputado por la provincia de Huarochirí, cargo que ejerció entre los años 1913 y 1930, período en el cual luchó indesmayablemente por la defensa del patrimonio histórico y arqueológico nacional. Presentó proyectos de ley en favor de la Protección y Conservación de Monumentos Históricos; y de la Reforma Universitaria, donde se enfatiza la investigación, la formación de docentes y la capacitación de profesionales a través de becas. Ya en los años 30 se convierte en simpatizante aprista, aunque nunca estuvo inscrito oficialmente, se hizo muy amigo de Víctor Raúl Haya de la Torre y de los principales líderes del aprismo, y fue el propio Tello quien le dio la idea a Haya de convertir el cóndor de chavín en el escudo oficial del APRA, cosa que repitió en los años 60 cuando el APRA impulsó la creación de algunas universidades, la más destacada, la Universidad Villarreal, la cual lleva como símbolo la Estela Raymondi, iconografía chavín muy estudiada por Tello.
La teoría sobre el origen de la cultura peruana
Tello hizo su aparición en el panorama científico del Perú defendiendo la tesis del autoctonismo de la cultura peruana precolombina y refutando la teoría de la procedencia mesoamericana (de México y Centroamérica) sostenida por el arqueólogo alemán Max Uhle.
Por autoctonismo cultural se entiende cuando una cultura es originaria del mismo territorio en el que se ha desarrollado. Tello sostuvo que la cultura más antigua del Perú fue la cultura Chavín, surgida hace 3000 años en la sierra oriental del departamento de Áncash, y que de allí se había irradiado hacia la costa y a otras regiones del área andina. Contradecía así a la teoría inmigracionista de Max Uhle, que sostenía que los elementos culturales arribaron a la costa peruana procedentes de Mesoamérica, para irradiarse luego a la sierra. Tello sostuvo también que los iniciadores de cultura Chavín fueron gente procedentes de la selva amazónica, portadores de una cultura rudimentaria, pero que con el tiempo forjaron una alta cultura, sin recibir ninguna influencia foránea. Para respaldar esta tesis del origen amazónico, señaló la aparente representación de animales amazónicos en el arte chavín, principalmente el caimán y el otorongo.
Según la teoría de Tello, la cultura peruana habría seguido más o menos el siguiente proceso:
a) En épocas prehistóricas, grupos de hombres primitivos procedentes del norte llegaron a la selva amazónica. Esta gente vivía de la caza, pesca y recolección.
b) En busca de un medio más acogedor, estos grupos fueron ascendiendo por el flanco oriental de los Andes y se establecieron en la ceja de selva o selva alta, zona que es muy favorable para la vida. Allí descubrieron la agricultura y aprendieron a cultivar maíz, yuca, camote, frijoles, maní y árboles frutales (papaya, chirimoya, palta, piña, guanábana, lúcuma, pacae, granadilla). Con la agricultura surgió la vida sedentaria, la construcción de viviendas, la fabricación de utensilios, tejidos, cestos, etc. nació propiamente la cultura.
c) Prosiguiendo su ascensión llegaron dichos hombres a la sierra interandina, donde perfeccionaron la agricultura. Domesticaron la papa, la cañigua, la quinua, la oca, el olluco y animales como la llama y la alpaca. Desarrollaron enormemente la textilería, la cerámica, la arquitectura de piedra, etc.
d) Posteriormente los hombres de las altas culturas serranas bajaron a la costa y formaron las culturas costeñas.